Rubalcaba ha dimitido, bueno ha dicho que se irá y
que convocará un congreso extraordinario para ver quién es el sucesor, como si
esto fuera una familia real. El dedazo. Más de lo mismo (luego se quejan). Hoy también
Patxi López ha manifestado que deja su cargo y que fijará un congreso para ver
quién manda en los socialistas vascos.
Parecen que los barones del partido quieren seguir
controlándolo puesto que no convocan primarias para determinar quién sería el
candidato. Todo hace ver que, a nivel nacional, se está preparando la alfombra
para que Doña Susana Díaz suba al trono del socialismo español. Susana I de España.
Aún así las primarias no están descartadas, pero
si todo sigue el programa que han sugerido Rubalcaba y Patxi, estarán tocadas en
su línea de flotación y casi hundidas ya que no serían abiertas y servirán tan
solo para confirmar lo ya elegido por algunos.
En cuanto al PP siguen afirmando, cada vez con la
boca más pequeña, que ganaron las elecciones. No mienten, tienen más votos que
los demás. Pero las caras de las fotografías donde aparecen Rajoy, o Cospedal,
o Cañete o Javier Arenas son un poema. Son caras de funeral más que de victoria
electoral.
Además, esas caras contrariadas y atolladas no
solo están así por la pérdidas de votos, escaños, euros y viajes en business a Bruselas, sino porque se les
ha ido un amigo fiel. Uno contra el que sabían cómo actuar y como debían
atacar. Rubalcaba, más blandito en su época de líder de la oposición que la de
ministro de Felipe González, era un amigo fiel de la derecha. Sin embargo, la
que parece que va a tomar el control, Susana Díaz, no saben cómo etiquetarla y
como actuar frente a ella. Les da el mismo miedo que Pablo Iglesias de Podemos.
Son gente demasiado jóvenes, nuevas y
rápidas para estos pesados partidos mastodónticos que se mueven con dificultad
en la realidad actual. De ahí los furibundos ataques contra Pablo Iglesias.
Susana I de España, si quiere puede hacer mucho daño al PP puesto
que no se le puede vincular con nada corruptible, su mensaje está gustando a
las bases del partido y ese partido tiene mucha gente que está dispuesta a
volverle a dar un voto de confianza. En el otro extremo, no ideológico, Pablo
Iglesias domina la calle, la comunicación y la red, cosas totalmente ajenas y
que nunca supo cómo utilizar el PP. Para Rajoy & cía. hablar de calle o
comunicación es hablar en chino. Ponen cara de bobos.
De hecho, la comunicación nunca fue un problema
para Rajoy, basta con no aparecer por donde están los periodistas y si se
encuentra alguno extraviado le dice que no se puede parar porque está lloviendo
o habla de fútbol. De los problemas de los españoles ni mu. El verdadero
problema de Rajoy es cómo devolverle a Florentino Pérez el desaire de celebrar
los goles de la décima champions del
Madrid con Aznar en vez de con él. Ya publican que le va a obligar a cerrar las
perforaciones de Castor, con millones de pérdidas, como gesto chulesco y señal de
que él no olvida.
Así nos va.
Imagen de http://www.elplural.com/2014/05/25/florentino-ignoro-a-rajoy-y-celebro-la-conquista-de-la-decima-con-su-amigo-aznar/